Trazados
nuestros propios limites, por lo que traspasarlos a veces no se duda en
desangrar a un ser humano, las fronteras, las religiones y la raza es el
pretexto, pero el verdadero motivo es la economía, esa que no la conocemos de
otra manera que para robarla en otras tierras, competirla con nuestros propios
conciudadanos, entenderla como exitosa o de fracaso según acapare el ser. Al
mismo tiempo tenemos que educar a nuestros pequeños y, algunas veces la misma
sociedad tiene muy claro como convertirlos en depredadores “caníbales” y otras,
con esa mentira que a veces si la ponemos con música de fondo entrañable,
intentamos hablarles del “mundo perfecto” mientras de una manera bipolar el ser
humano crece con esa gran mentira, y es otro ser esquizofrénico. Estoy
totalmente convencido que el ser humano está enfermo, y el que le han
diagnosticado algún problema sicológico es porque no ha podido aguantar este mundo
cruel, ese mundo donde a la ciega trabajadora para que echarla, le cambian de
sección de identificación sin sistema braille, y a una persona impedida con
silla de ruedas, le hacen tirar de carros, y al no poder hacer su trabajo las
echan por bajo rendimiento. Cuando me lo contaron creí que era un chiste, pero
me aseguraron que era cierto. El hijo puta que recibió la orden de ventilarse a
estas dos personas, cuando se juntó con los demás de esa sección de recursos
humanos, ¿Se descojonaban mientras planificaban esta broma? Si tienen hijos ¿Le
contarán esa gran hijo putada? ¿Y los
sindicatos? Todo esto me hace pensar en la poca esperanza que tengo en el ser
humano esquizofrénico, y la venida del ser “loco”
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